jueves, 21 de mayo de 2009

Baso estaba en la misma montaña sin hacer nada más que zazen día y noche. Un día el maestro Nangaku preguntó a Baso: “Señor, ¿Qué hace usted aquí?” “Hago zazen”, respondió Baso. “¿Qué espera conseguir haciendo zazen?”, preguntó Nangaku. “Sólo intento ser un Buda”, le contestó Baso. Al oír esto Nangaku agarró un ladrillo y empezó a pulirlo. Baso se sorprendió y le preguntó “¿Por qué pules ese ladrillo?”. Nangaku respondió “estoy intentando pulir este ladrillo hasta dejarlo como un espejo”. Y Baso volvió a preguntarle “¿Cómo puedes pulir un ladrillo hasta dejarlo como un espejo?”. Nangaku le respondió “¿Cómo puedes sentarte hasta ser un Buda?”.

Shibayama

No hay comentarios:

Publicar un comentario